Gracias a casaartedesign (instagram) por enviarnos esta colección de cancioneros ochenteros de Editora Cinco.

En la actualidad, conocer la letra de una canción es una tarea muy sencilla. Páginas especializadas en Internet contienen las letras de miles de canciones, al tiempo que una búsqueda rápida en Google nos permite dar con las letras de la mayoría nuestras melodías favoritas en cuestión de segundos. Finalmente, cabe mencionar que en YouTube o en Spotify muchas canciones vienen acompañadas con sus respectivas letras.

Sin embargo, antes de que Internet se popularizara, la cuestión era distinta. Para conocer la letra de una canción (aparte de escucharla, si era en un idioma que conocíamos) era necesario buscarla en pequeños libritos o folletos que acompañaban discos, cds o cassettes. Otro método popular eran los cancioneros.

Los primeros cancioneros conocidos provienen de la Edad Media, remontándose al siglo XIII. Estos son conocidos generalmente por los nombres de las bibliotecas en las que se conservan, como el Cancionero de Ajuda (que tiene lírica galaicoportuguesa medieval y está preservado en la biblioteca de la ciudad portuguesa con su nombre).

Como vemos, este mecanismo de origen medieval fue, hasta hace muy poco, uno de las principales maneras como generaciones enteras aprendieron y cantaron las letras de sus canciones favoritas.